Hoy no tenía previsto escribir, en principio iba a hacer una sola entrada con la estancia 'en las tierras de la Mancha' pero he cambiado de idea.
Esta mañana hemos dejado Toledo, por cierto, la salida del hotel Real de Toledo es por la misma (muy estrecha) curva que por donde se entra, no por la otra salida del callejón, pues éste se estrecha hasta el punto de que no cabe ni el Golf.
Dicho esto, y tras muchas maniobras, nos hemos puesto en camino por tierras toledanas. La primera parada, que no ha sido tal, ha sido Mora, pues el pueblo daba bastante grimilla y buscando el castillo, que era la principal atracción, pues desde él se ven espectaculares vistas de los campos de olivos de la zona, nos hemos liado de manera tal que, nos hemos tenido que conformar con ver los paisajes desde la carretera misma, que no es poco.
Esta mañana hemos dejado Toledo, por cierto, la salida del hotel Real de Toledo es por la misma (muy estrecha) curva que por donde se entra, no por la otra salida del callejón, pues éste se estrecha hasta el punto de que no cabe ni el Golf.
Dicho esto, y tras muchas maniobras, nos hemos puesto en camino por tierras toledanas. La primera parada, que no ha sido tal, ha sido Mora, pues el pueblo daba bastante grimilla y buscando el castillo, que era la principal atracción, pues desde él se ven espectaculares vistas de los campos de olivos de la zona, nos hemos liado de manera tal que, nos hemos tenido que conformar con ver los paisajes desde la carretera misma, que no es poco.
De este modo, la carretera nos ha llevado hasta Tembleque, un pueblo normalito hasta que llegas a la plaza Mayor, con unos soportales barrocos en tres de las cuatro fachadas, en dos palabras, IM-presionantes, ciertamente, Tembleque merece la visita tan solo por esta plaza, aparte de eso, tiene la iglesia de rigor y me ha gustado especialmente lo que actualmente es la biblioteca municipal, pues se trata de una ermita de forma octogonal (ermita de la veracruz).
Después de Tembleque, y de comer, of course, nos hemos desplazado hasta Consuegra, un pueblo (que ojo es del tramo VIII de la ruta del quijote, es que somos unos viajeros de lo más intrépidos ;p) que destaca por tener una panorámica de molinos de viento, se dice que son los que Don Quijote confundió con gigantes, en lo alto de un cerro, al lado de un castillo. La vista ciertamente es muy bucólica, especialmente cuando uno de los objetivos del viaje era ver molinos de viento y, ver si Pauilolo los confundía con ventiladores, bueno, pues dormía :O(. Después de la sesión fotográfica de la crestería de Consuegra, hemos bajado al pueblo y hemos dado una vuelta, la plaza mayor también es muy bonita, seguramente empañada en nuestro subconsciente por haber visto la de Tembleque horas antes, y el resto del pueblo pues está bien para un ratito.
La siguiente parada ha sido Alcazar de San Juan, ya en la provincia de Ciudad Real, un pueblo que entrando hemos pensado que daba miedo (estilo Mora), pero que el casco histórico nos ha sorprendido muy gratamente, históricamente fue muy importante pues dominó el priorato de la zona y tiene un conjunto monumental curioso, pues la piedra es muy rojiza, estilo Collounges la Rouge en el Perigord Noir. Además el pueblo no es tan pueblo, y cabe la posibilidad que todavía volvamos a recorrer la parte más nueva donde incluso hemos localizado unos caballitos, pero esto leerlo flojito no sea que Pau se dé cuenta.
Pero el motivo de la entrada es la casa Santa Ana de Miguel Esteban, de la casa ya os hablaremos en los datos prácticos cuando toque, pero de momento avanzar que se está de fábula y del pueblo, mejor otro día porque hoy simplemente ha sido alojarnos, ordenarlo todo y bajar a la zona común, donde Pauilolo se ha puesto a jugar con Ale, una niña madrileña de febrero del 2010 con la que ha congeniado en seguida, de modo que me he quedado en la casa escribiendo este rollo sin poder ir a la procesión del pueblo, a la que ha ido Mireioneta con otra pareja que se aloja en la casa y Joaquín y Oscar, los propietarios (para que veáis el ambiente que se respira aquí).
Aunque reconozco que me costaba muchísimo concentrarme en la escritura, pues la vista se me iba hacia esta pareja de dos, que han corrido, han hecho teatro, ha jugado al conecta 4... si fuera una madre de esas tontas diría algo así como.... están taaaaan monossssssssssssssss. Pero es que lo están.
Pel que fa la processó... ha estat molt bé. El Joaquín, el propietari de la casa, ens ha acompanyat a una parella de Madrid i a mi tot fent de guia... pel camí ens ha ensenyat un local on han representat obres i ens ha donat 5 cèntims de la seva vida al poble... quan érem a la plaça de l'església mirant els passos, ha vingut l'Òscar, el seu company. Ens ha explicat que algun dels passos els han de guardar a cases particulars perquè no hi caben tots a l'església. Des d'un balcó, una noia ha cantat una saeta, tot el poble era allà amb les seves millors gales, tots es saludaven i es desitjaven bona Setmana Santa... per algú de ciutat com jo,aquesta familiaritat és entre entrenyable i estranya.
Después de Tembleque, y de comer, of course, nos hemos desplazado hasta Consuegra, un pueblo (que ojo es del tramo VIII de la ruta del quijote, es que somos unos viajeros de lo más intrépidos ;p) que destaca por tener una panorámica de molinos de viento, se dice que son los que Don Quijote confundió con gigantes, en lo alto de un cerro, al lado de un castillo. La vista ciertamente es muy bucólica, especialmente cuando uno de los objetivos del viaje era ver molinos de viento y, ver si Pauilolo los confundía con ventiladores, bueno, pues dormía :O(. Después de la sesión fotográfica de la crestería de Consuegra, hemos bajado al pueblo y hemos dado una vuelta, la plaza mayor también es muy bonita, seguramente empañada en nuestro subconsciente por haber visto la de Tembleque horas antes, y el resto del pueblo pues está bien para un ratito.
La siguiente parada ha sido Alcazar de San Juan, ya en la provincia de Ciudad Real, un pueblo que entrando hemos pensado que daba miedo (estilo Mora), pero que el casco histórico nos ha sorprendido muy gratamente, históricamente fue muy importante pues dominó el priorato de la zona y tiene un conjunto monumental curioso, pues la piedra es muy rojiza, estilo Collounges la Rouge en el Perigord Noir. Además el pueblo no es tan pueblo, y cabe la posibilidad que todavía volvamos a recorrer la parte más nueva donde incluso hemos localizado unos caballitos, pero esto leerlo flojito no sea que Pau se dé cuenta.
Pero el motivo de la entrada es la casa Santa Ana de Miguel Esteban, de la casa ya os hablaremos en los datos prácticos cuando toque, pero de momento avanzar que se está de fábula y del pueblo, mejor otro día porque hoy simplemente ha sido alojarnos, ordenarlo todo y bajar a la zona común, donde Pauilolo se ha puesto a jugar con Ale, una niña madrileña de febrero del 2010 con la que ha congeniado en seguida, de modo que me he quedado en la casa escribiendo este rollo sin poder ir a la procesión del pueblo, a la que ha ido Mireioneta con otra pareja que se aloja en la casa y Joaquín y Oscar, los propietarios (para que veáis el ambiente que se respira aquí).
Aunque reconozco que me costaba muchísimo concentrarme en la escritura, pues la vista se me iba hacia esta pareja de dos, que han corrido, han hecho teatro, ha jugado al conecta 4... si fuera una madre de esas tontas diría algo así como.... están taaaaan monossssssssssssssss. Pero es que lo están.
Pel que fa la processó... ha estat molt bé. El Joaquín, el propietari de la casa, ens ha acompanyat a una parella de Madrid i a mi tot fent de guia... pel camí ens ha ensenyat un local on han representat obres i ens ha donat 5 cèntims de la seva vida al poble... quan érem a la plaça de l'església mirant els passos, ha vingut l'Òscar, el seu company. Ens ha explicat que algun dels passos els han de guardar a cases particulars perquè no hi caben tots a l'església. Des d'un balcó, una noia ha cantat una saeta, tot el poble era allà amb les seves millors gales, tots es saludaven i es desitjaven bona Setmana Santa... per algú de ciutat com jo,aquesta familiaritat és entre entrenyable i estranya.
Comentaris
Publica un comentari a l'entrada